Senasa recordó que no está permitido el uso de antibióticos en las colmenas.
En resguardo de la salud pública no se encuentran autorizados los productos veterinarios antibióticos que estaban aprobados para el tratamiento de enfermedades bacterianas como loque americana y europea.
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) recuerda a los productores apícolas que, desde el año 2016, fueron retirados del listado de productos veterinarios aprobados para uso en apicultura aquellos elaborados en base al principio activo oxitetraciclina, destinados al tratamiento de las enfermedades loque americana y loque europea.
Con el objetivo de velar por la calidad e inocuidad de la miel producida en nuestro país, el Senasa requirió a los establecimientos elaboradores de productos veterinarios información técnica relacionada con los límites máximos de residuos (LMR) de los antibióticos que los integran, así como también los respectivos períodos de carencia (período que debe transcurrir entre la última aplicación y el ingreso de miel en la colmena).
Dada la inexistencia de referencias científicas a nivel mundial que permitan determinar los LMR en miel para productos formulados a base de oxitetraciclina, los establecimientos elaboradores optaron por eliminar de los marbetes la indicación de uso en apicultura.
En nuestro país, el uso de estos antibióticos en la producción apícola se remonta a varias generaciones de productores que adoptaron en forma rutinaria la aplicación de estas sustancias. En este contexto desmesurado y de uso inadecuado, la antibioticoterapia ocupó el erróneo lugar de terapia preventiva o manejo sanitario preventivo para loque europea y loque americana.
La amplia difusión de esta práctica sanitaria incorrecta generó dos problemáticas en forma simultánea: la presencia de residuos de antibióticos en miel -situación altamente riesgosa para la salud de los consumidores- y la generación de resistencia de los agentes microbianos que se querían controlar, que a su vez propició la aplicación de dosis cada vez mayores.
En la actualidad, resabios de esta peligrosa e incorrecta práctica continúan generando, aunque con muy baja frecuencia, casos positivos de residuos de antibióticos en miel. Es por ello que urge la necesidad de advertir sobre lo innecesario que resulta el uso de antibióticos en apicultura y a la vez adecuar el sistema de trazabilidad de la miel argentina para detectar ágilmente las causas de los desvíos de calidad y corregirlos desde su origen.
Desde hace algunas décadas se demostró en nuestro país que el manejo sanitario de loque americana y loque europea puede desarrollarse sin inconvenientes mediante la aplicación de buenas prácticas sanitarias, sin recurrir a los antibióticos.
Incorporar material genético seleccionado, minimizar situaciones de estrés para la colonia de abejas, atender los aspectos nutricionales, así como también la limpieza, higiene y el recambio del material de las colmenas, son pilares fundamentales que la mayoría del sector productivo incorporó, logrando excluir los antibióticos de sus prácticas apícolas.
El Programa Nacional de Sanidad Apícola recomienda a los productores consultar periódicamente en la página del Senasa el listado de productos autorizados para uso en apicultura con el objetivo de tomar conocimiento de las modificaciones que se producen.
Ante cualquier duda, comuníquese con el Programa Nacional de Sanidad Apícola al correo electrónico apicultura@senasa.gob.ar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario